…meado se levanta. Es lo que sabe ahora Miguel Blesa, presidente de Cajamadrid con la puerta de salida abierta. Blesa ha sido mamporrero financiero de Esperanza Aguirre desde que la lideresa decidió que las elecciones las gana la derecha o se repiten. Hay una serie de personas manchadas del fango mafioso desde que Tamayo y Sáez dieron la espantada y una muy principal es Miguel Blesa. Fue él quien vio su cargo amenazado tras el anuncio del pobre Simancas (el Mariano Rajoy del PSOE) de que tras su investidura cambiaría la presidencia de Cajamadrid. Pocos días después Tamayo se escondió en un hotel escoltado por Intereconomía, que siempre está donde está la noticia.
Los madrileños y las madrileñas votaron en 2003 una mayoría alternativa al Partido Popular. Una mayoría conformada por el Partido Socialista e Izquierda Unida iba a gobernar la Comunidad de Madrid, como era lógico. Hasta que dos tipos la armaron. La tipa, María Teresa Sáez era desconocida en la Asamblea de Madrid. Su única intervención recordada fue un ‘No te se oye’ al detectar que un micrófono no funcionaba adecuadamente. Poco después agregó a nuestro acervo parlamentario la respuesta ‘Eeeeh, no a todo‘, con la que nos echamos unas risas. El tipo, Eduardo Tamayo, sí era conocido por la oficina que tenía en Caracas desde la que apoyo el golpe de Estado en Venezuela de 2002. Un corrupto golpista y una inútil se dejaron comprar para violar el mandato democrático del pueblo madrileño.
La madeja de la operación nunca ha sido completamente desliada, aunque básicamente sepamos que una parte del sector de la construcción madrileño necesitaba la victoria de Aguirre y contaron con la ayuda de quienes tenían mucho que ganar: desde el empresario mafioso (y ex-diputado pepino) Julio Ariza a la cooperación necesaria de Cajamadrid, presidida ya entonces por Miguel Blesa, hoy cadente.
Y ahí está el quid de la cuestión. Hace unos años un altísimo cargo político confesaba en petit comité que se sabía lo que había pasado con el tamayazo, pero que nadie, incluido él, estaba dispuesto a contarlo por miedo a lo que le pudiera pasar a sus hijas. Hoy hay quien tiene esperanzas (con perdón) en que a Miguel Blesa le dé un ataque de cuernos y cuente lo que sabe. Yo no estoy muy seguro de que lo vaya a hacer. Si quienes más fueron golpeados por la trama no se atreven a denunciarla, es difícil que quien puede haya obtenido prebendas se vaya de la lengua. Sobre todo, cuesta pensar que alguien esté dispuesto a dilapidar toda una carrera al servicio de la indignidad ahora que sus compañeros de travesuras le han dado una patada en el culo.
Que no. Que no me creo que Miguel Blesa vaya a ser ahora respetable.
NOTA: Podéis leer también sobre el asunto:
- ‘Esperanza Aguirre y Miguel Blesa: el Padrino II’ en el blog ceros a la izquierda.
- ‘De cajas y caixes‘ en el blog Punts de Vista
- ‘Caja de Madrid, nuevo escenario de la batalla del PP‘ en el blog Romenauer
- ‘Besa y Aguirre‘ en el blog A sueldo de Moscú
- ‘¿Por qué no un Caja Madrid de carácter social?‘ en el blog Ventanas del Falcón
- ‘Aguirre echa a Blesa por la puerta de atrás‘ en el blog Kabila
Muy interesante todo elo.
También es muy interesante, estudiar a «los balbases» y a quien han ido apoyando en cada proceso, incluido el que dió a Zapatero la secretaria General del PSOE y quienes eran sus valedores en el PSOE antes de la traición.
Felicidades por el premio que ganará mañana.
Amei, me dejas en ascuas… Un abrazo
Esperanza, doña «erre que erre»
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, negó ayer por la mañana conflicto alguno en Caja Madrid. Sin embargo, pocas horas después, a las cinco de la tarde, empezaron a volar los cuchillos en la Comisión de Control de la entidad. De un lado, los partidarios de Aguirre que quieren relevar a Miguel Blesa. Pablo Abejas, presidente de la comisión, estuvo a la cabeza del grupo con tres miembros más. Enfrente, ocho consejeros, el 61,5%, que han pedido por escrito una reunión extraordinaria para que se inicien las elecciones y se trate el cese de Abejas. Según fuentes de la entidad, se debe convocar una reunión extraordinaria si tres o más miembros la piden. Abejas respondió que la petición había caducado y que la reunión solicitada sólo tenía carácter político, por lo que se negó a convocarla. En Caja Madrid están estudiando las acciones legales pertinente ante el bloqueo de la situación. Otras fuentes dudan de que el grupo de ocho consejeros se mantenga unido por lo que podrían perder fuerza, informan El País, ABC y Expansión.
Carlos Menéndez
http://www.creditomagazine.es